Bueno, ya era hora, una semana después vuelvo a escribir.
En esta ocasión, os quedareis sorprendidos porque este relato no es un relato sobre algo relacionado con la bici o algo relacionado con algo que tenga que ver con ella de alguna manera directamente.
Desde que empecé a escribir en el blog (hace ya unos meses) no he dejado de recibir felicitaciones por hacerlo.
Cada semana intento sacar tiempo para poder escribir algo nuevo que contaros y así daros a conocer si es posible una visión de como veo yo la vida o de algo que me sucede.
Pues bien, cual es mi sorpresa que ya en varias ocasiones me quedo sorprendido cuando alguien me felicita por mi blog o me hace alusión a el sin yo pensar que la gente lo lea.
A mi me hace muy feliz que la gente me dedique unos minutos de su vida a leer mi blog o mis entradas semanales. Me parece la ostia que la gente se meta en el blog y deje mensajes o que simplemente lo lea, no pensé que este blog pudiera llamar tanto la atención de la gente que me rodea o me conoce.
Incluso se que tengo algún o alguna lectora que me lee sin conocerme en persona y eso me llena aun más.
Bueno, sólo quería daros las gracias a todos por dedicarme un rato algún día a la semana y pararos a leer mi blog, es para mi todo un placer el conocer que os guste y que le dediques unos minutos. Gracias de verdad.
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